jueves, 27 de octubre de 2011

"Despelleja a Rumel en Chilenia". Nuestro Primer Concurso / Hay ganador

Pablo Rumel, chilénico, periodista egresado de la UPLA, miembro de "cafeinamedia" y director de diversos cortometrajes en este portal, es también un dandy, un viajero, un poeta y un escritor. Pronto en aficción leerán una reseña de su nueva novela "Secuencia Chobart: policial metafísico". Gánate un ejemplar autografiado y enumerado más una cita con el mismísimo autor, ¿qué hacer? es sencillo, comenta esta entrada con una sencilla historia: ¿a qué personalidad chilena despellejarías y cómo lo harías?, la mejor entrada gana libro enumerado más la cita.


Criterios de evaluación:
a) Honestidad
b) Creatividad
c) Buena gramática y ortografía

Comité evaluador:
R. F. Yáñez: Periodista, colaborador de Fantasía Austral y pronto a estrenar una nueva saga ciberbolivariana en Chilenia.
Emiliano Navarrete: Memorista en sociología, Canciller de Chilenia, cronista de Aficción y ensayista en diversos medios.
Pablo Rumel: Periodista, colaborador de Chilenia, poeta, escritor, viajero y audiovisualista, ganador Premio Novela Mago Editores 2010 con "El secuestro".

Concurso realizado en convenio con la editorial "Emergencia Narrativa" y su autor Pablo Rumel.

Deliberado el jurado, despues de múltiples amenazas con bisturí, hemos decidido que el ganador de nuestro primer concurso es: Fraterno Dracon Saccis.

Felicidades. Envíanos un mail a nuestra cuenta de correo para hacerte llegar tu premio.

Para ver más obras del autor puedes revisar los siguientes cortometrajes y una charla:

16 comentarios:

  1. Definitivamente despellejaría al congreso completo, grupete de ineptos que ganan hasta cien veces lo que pueden ganar algunos compatriotas. Como son demasiados los colgaría a todos de una larga barra de acero amarrados de sus muñecas, les haría un pequeño corte de no más de 2 centímetros de largo en sus tobillos, el cual extendería un par de centímetros bajo la piel y sobre el músculo. Luego simplemente conecto a cada tobillo un compresor de aire y dejo que la física haga lo suyo. Ah, necesitaría por supuesto un par de audífonos con aislamiento acústico para escuchar música sin sentir los gritos: soy un psicópata sensible...

    Saludos sangrientos

    Blood

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  2. Buena pregunta has hecho,joven amigo. Tendría que ver en mi lista a quien despellejaría ¡Ja, Ja, Ja!
    En fin, la gracia es escoger uno y eso debo hacer. Yo creo que Rodrigo Hinzpeter es al que elegiría, por ser un hipócrita en sus dichos... y lo haría muy meticulosamente. Primero estudiaría sus hábitos y costumbres diarias para saber cuando atacar. Al tenerlo claro lo abordaría por detrás con un pañuelo con alcohol y subiría a la cajuela de un auto. Al estar bien amarado a las 4 esquinas de una mesa y bien despierto en una bodega, empezaría mi macabro operación con un bisturí y jugo de limón (para limpiar mi herramienta de corte y causar mucho dolor en las heridas). Lentamente empezaría despellejar al ministro del interior, mientras siga consciente, grabando todo este operativo y el rostro de terror de mi invitado. Al terminar de sacar su piel y sí sigue con vida, a pesar del shock, con un cuchillo lo degollaría para poner fin a su existencia.

    La piel que extraje de mi victima lo usaría para fabricar una capa como la de doctor doctor mortis...

    Espero que les gusten mi respuesta ficticia Muajajaja

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  3. Tomaría a mi novia. La besaría por todo el cuerpo, hasta que se le caiga la piel. La echaría a hervir primero, eso sí. Soy un hombre impaciente.

    Sick enough?

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  4. Yo creo que me despellejaría a mi mismo, somos animales hipócritas y mentirosos, todos y cada uno, antes de empezar a despellejar a los demás, deberíamos hacerlo con nosotros mismos y luego con conocimiento de causa hacérselo a quienes no tienne el coraje, la valentía y el valor de hacerlo, partiendo por las autoridades, luego las fuerzas públicas, para terminar con todos los pedófilos y así bajando la escala.

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  5. Hablar de despellejar ó despellejados…. es como la típica frase de justos o pecadores…. Hagamos un análisis, ¿que tanto hemos hecho como ciudadanos?. Porque esperamos una revolución, si cuando vemos a nuestros propios vecinos afectados hacemos caso omiso….. como la historia de: se llevaron a una persona que vivía cerca de mi casa y no me preocupe, luego se llevaron a mi vecino de la esquina y no me preocupe….. llegaron a buscar a mi amigo del lado de mi casa y comencé a preocuparme, pero no hice nada…. Ahora me vienen a buscar ami y recién me comencé a preocupar…. Lo más probable es que pienses en los tiempos de dictadura, pero no es tan así. Pasaron supuestamente esos tiempos, pero después de esos siguieron… ¿Qué se logro después de eso?... solo ilusiones que te mantuvieron en la esperanza, nos alucinaron con el cambio…. Y a costa de que…. De nosotros mismos, los que clase media, porque el discurso siempre fue que el Chile solo existía clase baja y alta, ¿y el resto?... que nos coman los ratones.
    Arreglar esto espero que no sea tan tardío….. No podemos seguir dándole plata a los pobres para que se la gasten en un equipo musical y copete para el carrete, habemos gente de clase media baja que necesitamos un apoye para poder surgir porque tenemos la necesidad y las ganas de hacerlo…. Suena cruel, pero el pobre va a seguir siendo pobre porque le sirve serlo y para que ser ciegos… políticamente también sirve para sus candidaturas.

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  6. Iría de manera ascendente. Partiría asesinando al más alejado eslabón para dar con este personaje. Un vagabundo, una muerte sin valor para nadie. Recibió limosna del tipo al que sigo diariamente. El le sonríe. Yo miro complacido. Mi primera víctima, mi primer encuentro de sangre. Le cortaré las manos. Sigo, luego, con uno de sus compañeros de trabajo. A ese le haré un corte en el cuello e introducire una corbata por ahí. Ya estoy cerca. Me faltarían 5 personas más y llegaré a su casa, me acostaré en su cama, oleré sus juguetes, bailaré con su nana, me masturbaré sobre su almohada. Ohhhh, Nicolás López, como te odio. Primero, haré que veas todas tus películas y escucharás los comentarios de Jorge Olguín. Sentirás ganas de vomitar. Luego te encerraré en una habitación llena de pulgas. Serán tantas las picadas, los ataques de estos diminutos insectos, que se rascará como un insano, y cada vez que lo haga, se hará heridas sobre cada una de sus ronchas y sangrará, sangrará como una sanguijuela partida en canal. Y se sacará la piel y quedará desnudo, musculos sangrantes, y yo reiré viendo como este ser odiado se despelleja vivo frente a mis ojos.

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  7. Está abriendo los ojos. Que agradable es el trauma que sienten sus ojos ante la fuerte luz de la lámpara.
    Poco a poco se da cuenta de que está maniatado y amordazado. Cuelga de las muñecas su fláccido cuerpo.

    -Buenos días. Ya era hora de que reaccionara.

    Se sorprende al oír mi voz. Parece intentar reconocerla. Obviamente no lo hará.

    -Está aquí porque este dedo –le acerco una bandeja de aluminio con el pellejo en su jugo carmesí- que alguna vez apuntó con valentía –nota la falta de piel y el aire haciendo contacto con el hueso. Se estremece, causando un terremoto en sus deprimidas carnes-, se alejó de su propósito. Usted era el llamado a cambiar la historia de este país y claro que lo hizo: vendió la mitad de nuestros recursos y, de la otra mitad, sus amigotes sacaron suculentas tajadas. Trenes inútiles, financiamiento de campañas para seguir robando… no voy a seguir enumerando sus faltas, ya las tiene claras.

    “Solo quiero que sepa, que usted es peor que sus opositores. Al menos ellos no tratan de disimular su total indiferencia por la gente que se supone deben servir. Usted nos vendió la alegría, y terminamos comprando un nuevo resentimiento, un nuevo enemigo.

    “No, no lo mataré. Pero lo deseará, muy pronto…”

    El primer corte del bisturí, perpendicular desde el hombro izquierdo hasta el esternón, arranca lágrimas y gritos apagados. Por un momento pienso en quitarle la mordaza para disfrutar de sus gritos, pero luego recapacito. No le daré el beneficio del desahogo.

    -Ahora comprendes lo que es sentirse impedido de expresar tu dolor…

    Termino de dibujar la “Y” en su torso.

    Dejo a un lado las palabras, para abrir el libro llamado: Ricardo Lagos Escobar.

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  8. De verdad?

    Yo despellejaría a Dios.
    Solo para ver que tiene dentro.

    Partiría despellejando a toda la farándula chilena que parece ser lo más cercano a Él a lo que accede el ciudadano comun.

    Luego rompería muchas partituras.

    Si eso no resulta, buscaría a Maradona.

    Pero bueno, ninguno es chileno :(

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  9. Despellejaría? yo, no despellejaría, yo voy a despellejar a la clase política chilena algún día, que bien merecido se los tienen, me gustará formar una nueva generación política en nuestro país y dejar sin trabajo a todos aquellos que se jactan de ganar el dinero de los chilenos, el dinero que por cierto se lo tienen mal ganado.
    Despellejaría a los programas de farándula, a los personajes que construyen la anti cultura chilena, la "telebasura". Claro, se puede decir que hacen su trabajo, pero como diría Quico del Chavo del 8.. "no me simpatizan" y punto.
    Puntualmente, despellejaría personalmente a E. Matthei, S. Piñera, el dichoso Bulnes, o el señor Villegas de Tolerancia 0, a Hinzpeter y a toda la plana mayor de las instituciones encargadas del orden en Chile, que usan sus "super poderes" para reprimir, a Sotito, el hombre de la tele que se hace llamar Ricarte cuando se debería llamar Ricardo, a Morande con Compañía donde se ríen de la homosexualidad, de las personas con discapacidades mentales, y se jactan de hacer dinero con eso, que asco.
    Eso sería, si es que no se me queda alguien en el tintero, o debería decir, el tecleo del computador.

    PD: perdón si que es que escribí con faltas de ortografía, es porque todavía padezco de algo de analfabetismo

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  10. Despellejaría al Padre Raúl Hasbún para dejar en evidencia "La raíz de todos los miedos"(sic).

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  11. Despellejaría al Padre Raúl Hasbún para dejar en evidencia "La raíz de todos los miedos"(sic).

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  12. Verdaderamente me iluminan vuestras respuestas. Quiero que hagamos el mismo concurso con los cinco libros pero en una cosa AB1. ¿qué me dicen? Tiren ideas. Los 5 libros eso sí de acá están prometidos. Saludos.

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  13. Lo espero en un rincon de su sala de oracion. Llevo mi canastito de labores: las cosas de bordar, de decoupage, y mi cajita de cuidado de los pies . Mis pasos no se sienten detras y probablemente no se da cuenta hasta que yo lo llamo ..solo por su apellido.."Hey, Karadima!". El se da vuelta con ojos de sorpresa y la tranquilidad del que sabe que nada se paga y que todo se puede hacer. Me acerco a el para plantar la primera estocada. Un cuchillo grande que uso para el salmón cuando hago el sashimi para los niños. Inconsciente lo llevaría al altar, probablemente la unica vez que una mujer lo arrastrara hacia el.
    Sobre la mesa vestida de blanco, y sin sacar su sotana blanca, dibujo un plano de los cortes: armónicos, limpidos y ordenados. He traido mi cuchillito cartonero, ese que uso para hacer las artesanias de goma eva. Con ese puedo seguir las lineas predibujadas y hacer los primeros cortes a través de la sotana. El hombre despierta del dolor pero no se puede mover. Una vez dibujado con mi tiptop, agradezco el buen material de la sotana. El algodón absorbe la sangre de manera impecable, y no me toca una sola gota de sus líquidos. Pero la tunica se rompe en trozos con los cortes. Entonces procedo a usar el resto de mis cuchillitos, pequeños, indefensos como los niñitos de la parroquia. Despacito voy desprendiendo los trozos de piel y los voy poniendo sobre el altar, como mantelitos.
    Las tijeritas de "decoupage" son las mas afiladas para los trabajos pequeños y por eso las escojo para la parte de la cara. La mascara de piel la dejo a un ladito, se ve estirada si la fuerzo un poco.
    Termino con las tijeras de uñas, esas que uso para los pies de mis hijos. Me gusta mandarlos con las uñas limpias y ordenadas a misa. Pero creo que el próximo Domingo tendremos que cambiar de Iglesia, probablemente el altar esté un poco sucio

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  14. Despellejaría a Pezoa, Huidobro, Mistral, Neruda, De Rockha, Teillier, Parra, Lihn, Bolaño, y Maquieira, por nombrar sólo algunos de los grandes poetas chilenos. Despellejaría a todos los grandes poetas chilenos, los que sobrevivieron a la muerte, al olvido. Y con tanta piel haría un macuñ para cubrir Chile.

    Leer poesía es despellejar al individuo.

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  15. No, yo no tengo nada que ver con despellejaciones ni similares... pero si a alguien le tengo que quitar el cuero (y lo haría a mordiscos ¬¬ ) es a ese innombrable del que no quiero decir su nombre, pero empieza con "J" y termina con "orge Baradit". No es nada personal (bueno, un poco) y no es que sea celoso (Bueno, también un poco) pero me hierve la sangre y los demás fluidos internos cuando mi novia me pregunta con voz dulzona "Y cuando va a sacar otro libro *<<"MI">>* Jorgín???" (si, tal cual, "Jorgín"¬¬), o como cuando pregunta "¿y le puedes pedir a *<<"MI">>* Jorge que me firme este libro?"... creo que eso es motivo más que suficiente NO SOLO PARA DESPELLEJARLO, sino para hacerle el MISMO ritual que le hicieron a Mariana los perfectos, después de que haya quedado pelado como un plátano.
    Dejo constancia que esto NO ES un ataque de celos, pero si algún día encuentran el cadáver del innombrable sin piel, tengan por seguro que el día anterior mi novia me pidió con esa dulce y suavecita voz enmelazada que le consiga ese cuento erótico que *<<"SU">>* Jorge escribió para un sex shop, de cuyo nombre no pienso acordarme ¬¬ .

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  16. Yo despellejaría a Rumel, ciertamente. Tener la bajeza de organizar un concurso con SU NOMBRE, donde el premio es el nuevo libro de SÍ MISMO en la página web donde ÉL es parte del equipo y auspiciado por la imprenta donde es procesada SU OBRA, no es digno de un tipo que hasta hace poco no sufría de megalomanía y, aún siendo un pésimo escribidor, al menos creía en la literatura como adalid. Lo despellejaría desde el tobilo hasta detrás de la oreja y le tallaría en sus huesos todos los teléfonos de la gente con apellido González para ver si recupera su humildad. Amén-se.

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