Categoría: Ensayo
Contar
historias no puede ser otra cosa que un modo de
dar
cuenta colectiva y pública de las patologías
individuales
estructurantes de un orden social.
El
habla de un personaje o el discurrir del narrador
es
sólo un síntoma de un delirio o de una voluntad criminal o,
al
menos, de la disolución de un mundo
(o
la construcción de otro con leyes arbitrarias).
Marcelo
Mellado1
Los Altísimos
de Hugo Correa es una obra emblemática de la ciencia ficción
chilena de todos los tiempos que le brindó el reconocimiento en
Latinoamérica, Estados Unidos y Europa y que aún continúa vigente
en el fandom literario nacional pese a la infravaloración de las
narrativas fantásticas para el canon nacional.
A juicio de Cedomil
Goic:
“LOS ALTISIMOS es una de las novelas más sorprendentes que se hayan escrito entre nosotros. A su condición de novela de extremada fantasía, ejemplar rarísimo en una tradición novelística de mediocre realismo, une el raro valor de ser una excelente novela, de sostenida coherencia en una perspectiva difícil de proyectar”.
Los Altísimos
narra el drama que vive su protagonista, Hernán Varela al despertar
en una extraña habitación de hospital que se encuentra en otro
mundo (Cronn). Debe, por obligación, asimilar una cultura y
costumbres deshumanizadas, llegando a aprender un oficio de
importancia al interior de esta sociedad; vigilar el espacio desde un
casco sobre la cabeza de unos seres manipulados genéticamente de
proporciones monumentales, llamados Máximos.
Pero qué hay en Los
Altísimos
que pareciera ser una novela atemporal, que sobrevive sin problemas
el paso del tiempo, transformándose en un clásico de la literatura
chilena, independiente del género o clasificación que se le quiera
imponer. Algunos aún creen ver solamente alusiones a la guerra
fría, visión bastante paranoide por lo demás. Lo más obvio es la
cita sobre Polonia y su relación con la Cortina de Hierro. Si
hurgamos un poco más podemos relacionar la fecha de publicación del
libro con el discurso pronunciado en 1956 por Nikita Jrushchov, A
cerca del culto a la personalidad y sus consecuencias o
también llamado discurso
secreto
en el que se denuncian los crímenes y excesos de Stalín en la Unión
Soviética y de la Gran Purga, antes de la Segunda Guerra Mundial. Es
cierto que todo esto está presente y es insoslayable, pero eso no es
la causa de la vigencia de Los
Altísimos,
existen otros componentes aún más profundos que nos mueven a sentir
empatía con el protagonista y en otras ocasiones a preguntarnos por
qué razón no se adapta y ya. La ideología parece ser lo central en
Los
Altísimos,
la manera de ver la vida, la cultura y la sociedad; la historia, el
trabajo, las relaciones personales, en fin todo lo concerniente al
ser humano.
Las aventuras de
Hernán Varela, más allá de lo fantástico, son situaciones
cotidianas, incluso contingentes. Nos hablan de alienación,
desarraigo, inmigración, filiación y lo principal se evidencia en
la búsqueda de la utopía, del mundo perfecto creado por medio de
los adelantos tecnológicos que solucionan todo cuanto retrasa el
desarrollo personal e individual del hombre.
Sin
embargo, esta visión utópica del protagonista se transformará en
utopía negativa, contra utopía o distopía2,
en el momento en que Varela tenga que enfrentar serias dificultades
de adaptación en un mundo de cualidades perfectas para una mayoría
que vive sin problemas ni cuestionamientos en él, disfrutando de los
beneficios sin pensar en los costos asociados a este modo de vida,
pues desconocen la existencia de castigos o represalias. El
protagonista en cambio, por ser extranjero, tiene una perspectiva
distinta a la de los ciudadanos Cronnios. Hernán Varela es un
inmigrante forzado, un desadaptado por accidente, que nunca consigue
la filiación completa.
Es difícil cambiar
un sistema de creencias que tiende a ser estable en el tiempo,
convirtiéndose en la carta de navegación cultural y social para un
individuo y sociedad completa. Llegar a un mundo de manera
involuntaria y forzosa y luego tener que adaptarse a ciertas
convenciones propias de un sistema de creencias completamente ajeno
al suyo, llevará a Varela a experimentar una serie de crisis de
identidad.
Las cosas por las
que los seres humanos luchan a diario no tienen sentido en Cronn, Uno
de los sentimientos principales, como el amor, es desconocido e
innecesario en aquella nave-planeta. La propiedad privada, el
desempleo, el matrimonio, los hijos, la libertad total son
inexistentes. Esa es la utopía construida por los Altísimos, en
ella viven apaciblemente por siglos los cronnios, sólo unos pocos,
algunos desadaptados que nunca faltan, son capaces de pensar
distinto, pero lo único que consiguen es escapar y plagiar a un
terrícola.
Es la mirada de
Hernán Varela la que hace que una utopía se transforme en distopía
y en una enmarcada en la ciencia ficción chilena, una space opera
que será la obra de ciencia ficción más importante escrita en
Chile y creo no exagerar cuando digo en Latinoamérica.
De acuerdo a lo
planteado por Estrella López Keller, a la utopía a través del
tiempo, se le “acusa de mecánica, geométrica, demasiado
matemática, frente a la variedad y voluptuosidad de la naturaleza”3.
Descripción nítidamente planteada en la obra Los
Altísimos,
es decir, todo está hecho a medida y con una intención práctica.
En Cronn no existen
países, sus habitantes viven en ciudades con edificios de
departamentos inteligentes que proveen de todo lo necesario al
visitante, una de estas ciudades es Ernn. Esta manera de concentrar
la población es planteada por Paul Virilio en su libro Ville
panique4
evidenciando así una pérdida de la importancia de los Estados en la
vida social, entregando a la ciudad una importancia trascendental en
la actualidad. En esto acierta Correa, en Los
Altísimos,
se anticipa al pensamiento del filósofo, anticipación que es una de
las claves de la ciencia ficción.
Ernn está compuesta
por edificios de departamentos inteligentes que son capaces de
interactuar y socializar con los huéspedes, tanto así que uno de
ellos expone la utopía de las ciudades y de la colectividad a
Varela. Las ciudades, son independientes y amistosas proveyendo del
bienestar necesario a los huéspedes que lleguen a solicitar asilo.
En todo caso se ha logrado una perfecta convivencia entre la ciudad y sus habitantes. Ernn es hospitalaria con sus huéspedes. Jamás se ha sabido que haya rehusado dar hospedaje a un forastero. –y añade con legítimo orgullo-: Nuestros edificios siempre se mantienen con sus departamentos bien surtidos de provisiones y ropas. ¡La cúspide en materia de urbanización! […] Hemos obtenido el ideal de muchos soñadores: que nuestras ciudades se pongan al servicio incondicional de la colectividad. (pág. 75)
Como
podemos observar, la perfección utópica se evidencia en las
palabras del edificio de Ernn y en este sentido, la novela tiene
trazas de lo que López Keller, menciona como utopía clásica, al
recrear un mundo sin problemas en “que la ciencia va a aportar la
base material que permita el desarrollo feliz de los hombres,
acabando con la escasez, solucionando todo tipo de problemas,
proporcionando placeres… (pág. 10)
El tránsito de
Hernán Varela en la novela Los
Altísimos ha
ido mutando, debiendo modificar su modo de pensar para lograr
adaptarse y sobrevivir ante lo desconocido y adverso, es decir,
lograr afiliarse a una sociedad con hábitos, costumbres, leyes e
historia diametralmente opuestas a las que Varela asumía en la
Tierra, en Santiago de Chile. Sin embargo, el adoctrinamiento
ideológico no es un asunto sencillo, debe sugerir y prometer una
utopía, una sociedad justa e igualitaria en que los individuos se
transforman en parte de algo superior, la colectividad.
Desde la percepción
de Varela, la perfección de esta sociedad dista mucho de ser una
utopía. Los aspectos éticos, en relación a las libertades
individuales, están derechamente alienados, haciendo que la
autopercepción del protagonista baje a niveles peligrosos.
A Varela se le
exigirá ser X., y esto es aún más decidor en el comportamiento y
adaptación del terrestre, ya que se produce un conflicto interno
ante la imposibilidad de ser otro a pesar del intento de adaptación.
El sistema
ideológico cronnio, ideado e impuesto por los Altísimos, será
incapaz de modelar al sujeto y su subjetividad. Si Varela se afilia a
la sociedad es precisamente con una finalidad práctica, de
supervivencia, ya que continúa albergando la posibilidad de escapar
a un mundo de similares condiciones a las de su Tierra natal.
En esta novela, lo
ideológico es la constitución del sentido práctico que los sujetos
cronnios hacen de su mundo, constituyéndose de un modo social que
clausura lo natural por una colectividad aséptica y artificial, tal
como lo es su mundo. Lo natural y lo originario desde el punto de
vista de lo material, como de lo subjetivo y metafísico, ya no
existe y Hernán Varela termina por acatar este orden establecido. Es
como sugiere Paulo Freire, “un mapeo ideológico”5
que le permite sobrevivir y esperar mejores condiciones, pero no es
él, ha perdido su identidad, transformándose en un sujeto
artificial. El ser social y el actor social aparecen disociados.
No
se puede dejar de ser lo que se aprendió a ser.
… verdaderamente jamás podré acostumbrarme a Cronn. Desciendo de una raza joven, que aún necesita miles de siglos de experiencia y sedimentación cultural para adquirir la civilización cronnia. Mal que mal, la Tierra aún ni sospecha la existencia de los Altísimos. (pág. 232)
Por
último, una vez asumido el destino y el rol que le toca vivir como
una pieza más dentro del sistema y alcanzando el consuelo al sentir
que todos están bajo la misma condición. Su trabajo es una
posibilidad que le permite albergar las esperanzas de encontrar vida
similar a la terrestre.
Varela, ahora como
explorador, desciende en los nuevos mundos, medita sobre su pasado en
la tierra y los inicios de la carrera espacial y ante la posibilidad
de repetir la historia de los cronnios. Varela, se encargará de
transmitirnos una advertencia. Nos llama a guardar la humildad y a no
creer que todo lo que el hombre es capaz de conseguir mediante los
adelantos tecnológicos y de la ciencia. Él sabe perfectamente que
la vida manipulada y dirigida por otros superiores, podría ser la
peor pesadilla para una humanidad que siempre ha buscado, aunque sin
encontrar, las condiciones para que la libertad se transforme en lo
que rija nuestras sociedades, en todos los tiempos y edades de
nuestra historia, aún en la actualidad.
BIBLIOGRAFÍA.
BARRAU, Aurelíen. (2007) La
idea de múltiples
universos es más que una fantástica invención.
CERN
Courier, págs. 13-16.
http://www.tendencias21.net/La-idea-de-multiples-universos-es-mas-que-una-fantastica-invencion_a1955.html
CORREA, Hugo. (1973) Los
Altísimos (Segunda edición) Chile, Ediciones Universitarias de
Valparaiso.
LÓPEZ KELLER, Estrella.
Distopía: otro final de la utopía. Universidad Complutense de
Madrid.
dialnet.unirioja.es/servlet/fichero_articulo?codigo=758594
MELLADO, Marcelo. (2011) Sujeto y
Narratividad, Istmo. Revista de Literatura & Psicoanálisis.
http://letras.s5.com/mm201111.html
NOVOA SEPÚLVEDA, Marcelo. (2011)
Francisco Miralles, Hugo Correa y Sergio Meier, Vindicación del
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Internacional El Orden de lo Fantástico: Territorios sin Fronteras.
Coloquiofanperú 2011
RODRÍGUEZ, Paulo. (2005) Paul
Virilio y la política del miedo. Entrevista, Revista Ñ. El Clarín.
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http://edant.clarin.com/suplementos/cultura/2005/03/26/u-944192.htm
SANTOS GÓMEZ, Marcos. (2008).
Ideas Filosóficas que Fundamentan la Pedagogía de Paulo Freire.
Revista Iberoamericana de Educación. N.º 46, pp. 155-173
http://www.elortiba.org/freire.html
Notas a pie de página
1
Mellado, Marcelo. (2011) Sujeto
y Narratividad,
Istmo.
Revista de Literatura & Psicoanálisis.
2
La distopía o utopía negativa se caracteriza fundamentalmente por
el aspecto de denuncia de los posibles o hipotéticos desarrollos
perniciosos de la sociedad actual [...] deduce un mundo futuro de
pesadilla a partir de la extrapolación de realidades presentes.
López Keller, Estrella. (p.15)
4
[…]es la posibilidad de una superación del Estado nacional en
beneficio de las grandes ciudades, las grandes metrópolis, que
tienen finalmente más importancia que el Estado-nación, como vemos
en Europa en relación con la Unión Europea. Hay entonces una
suerte de metropolarización, diría, de la política. Se comienza a
hablar de Ciudades bienestar (ville-providence) que superan al
Estado de bienestar (Etatprovidence). Con la mundialización, el
mundo se concentró en las ciudades, como la economía. Pasamos de
la geopolítica, formada por la grandeza de los países, con sus
territorios y sus fronteras, a la metropolítica. La ciudad tiene
más importancia que el Estado. La crisis del Estado pone en
cuestión la extensión nacional en beneficio de la concentración
local de la gran ciudad. Paul Virilio y la política del miedo
Entrevista de PABLO RODRÍGUEZ
5
¿Qué significa el mapeo ideológico? No es geográfico, es
ideológico, el relevamiento ideológico. Por ejemplo, yo necesito
saber con quiénes puedo contar y con quiénes tengo que pelear, en
otras palabras: yo tengo que saber quiénes sin mis enemigos,
potenciales o actuales. Antes de intentar cualquier trabajo éste es
el trabajo". http://www.elortiba.org/freire.html